ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla

El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, denunció hoy ante la prensa nacional y extranjera que el gobierno de EE.UU. ha decidido excluir a Cuba de los preparativos de la venidera Cumbre de las Américas, que tendrá lugar en Los Ángeles del 8 al 10 de junio.

El canciller instó al Secretario de Estado Anthony Blinken a que diga si Cuba será invitada o excluida a la Cumbre, y si se excluirá a otros países.

Rodríguez Parrilla agregó que EEUU promueve en estos momentos un plan regional en materia de salud, que negocia de manera opaca, y lamentó que con la experiencia y el reconocimiento internacional con el que cuenta Cuba en estos temas no se le haya incluido en su negociación.

Sostuvo que "EEUU envía soldados en lugar de médicos" y que ha utilizado la pandemia para sus intereses políticos.

La pandemia ha sido aliada táctica de EEUU contra Cuba, manifestó al referirse a la medidas de recrudecimiento del bloqueo y las sanciones impuestas durante los últimos años contra la Isla.

"El bloqueo es una violación masiva, sistemática y flagrante de los derechos de los cubanos, de las familias en los EEUU, y también de los estadounidenses", dijo.

Agregó, asimismo, que el bloqueo asfixia la economía cubana, es un política distinta a la que sigue con cualquier otro país del planeta, es selectiva y discriminatoria.

Denunció que ha sido una política que ha estado acompañada, de una manera desvergonzada, de una campaña contra la cooperación médica cubana, mediante la presión a otros gobiernos.

En tanto, el Canciller afirmó que "EE.UU. carece de moral alguna para hablar de DDHH".

"En ese país se violan los derechos de las minorías, se discrimina a los afrodescendientes, existe explotación laboral en cárceles privadas, promueve guerras y tiene cárceles secretas en el mundo", aseguró.

"Cuba respalda los esfuerzos genuinos para fomentar el diálogo, los vínculos y la cooperación entre los países del continente, entre los miembros de la CELAC y EEUU, afirmó el canciller.

"Debiera comprender EEUU que la región de América Latina y el Caribe ha cambiado para siempre", añadió y agregó que ya no existe lugar para los preceptos del Panamericanismo y la Doctrina Monroe.

De acuerdo con el ministro, "el país anfitrión de la Cumbre de las Américas no tiene ningún derecho a imponer exclusiones arbitrarias".

"Se trata de una decisión políticamente motivada y sin otro sustento que acusaciones falsas y doble raseros para ocultar su verdadera naturaleza, vinculada a la política interna y electoral de EE.UU."

Afirmó que la exclusión de Cuba de la Cumbre constituiría un grave retroceso histórico en relación con cumbres anteriores.

Al concluir su declaración, el ministro afirmó que "sobre democracia poco podrá exhibir en esa Cumbre incompleta, el gobierno de Estados Unidos", y preguntó al Departamento de Estado si permitirán a la sociedad civil del hemisferio participar en el evento sin exclusiones.

Sobre las recientes conversaciones migratorias bilaterales, Rodríguez Parrilla aseguró que fueron positivas porque EEUU reconoció la plena vigencia de los acuerdos migratorios, y que su gobierno los ha incumplido y descontinuado. Fue positivo, además, el anuncio del reinicio de los servicios consulares en La Habana.

No obstante, la política estadounidense hoy continúa favoreciendo la emigración irregular, ilegal e insegura desde Cuba.

"Lo nuevo es que ha impuesto a terceros países visas de tránsito discriminatorias contra viajeros cubanos y los obliga a reducir la cifra de estas", dijo.

En este sentido, preguntó directamente a Washington: "¿Cuándo se cumplirá con la obligación de dar no menos de 20 000 visas anuales a los cubanos? ¿Cuántas visas se darán en 2022? ¿Hasta cuándo los cubanos se verán obligados a viajar a Guyana para optar por un visado? ¿Qué ocurrirá con la reunificación familiar?"

En video, la conferencia